La Constitución Política de la República de Chile consagra el derecho a las prestaciones médicas a favor de todas las personas.   Al menos esto lo desprendemos de la lectura de su artículo número diecinueve.    El sistema de salud en Chile busca asegurar un libre e igualitario acceso a la salud.  Se garantiza a su vez, la posibilidad de elegir el régimen de salud que más  convenga, sea éste privado  (ISAPRES) o público(FONASA). La ley 19.966  contiene las garantías explícitas de salud        donde se priorizan enfermedades, o  condiciones de salud cuyas prestaciones se encuentran aseguradas   con carácter obligatorio.  El decreto que estableció el plan AUGE es forzoso, tanto  para las  ISAPRES como para  FONASA, debe contener ciertas prestaciones que se consideran indispensables y es precisamente a través de mecanismos legales como este, que se asegura a todas las personas una mejor cobertura ante la indefensión que provoca una larga y penosa  enfermedad.  Como vemos, es importante que los países legislen sobre materias como ésta, así también es posible mejorar en áreas como: pensiones, accidentes, subsidios, cesantía e incluso prestaciones familiares.